La preocupación por el bienestar de los empleados ocupa desde hace años, y con especial incidencia tras los cambios producidos por la pandemia, los primeros puestos en las estrategias y prioridades de los departamentos de recursos humanos. Lo llevamos viendo continuamente en los listados de tendencias y estudios sobre este tema, en los que líderes y directores de Recursos Humanos apuntan a la experiencia del empleado como una de sus principales preocupaciones para la retención del talento.
Y no es una tendencia pasajera, sino que se está convirtiendo en uno de los grandes ejes estratégicos para el crecimiento empresarial. En plena guerra por el talento, y en un contexto socioeconómico en el que los cambios están a la orden del día, contar con empleados comprometidos que desarrollen todo su potencial en la organización es crucial.
Varios son los elementos que tienen relación directa con esto, como son las expectativas de asumir nuevos retos y responsabilidades, ser valorados por sus superiores y saber que tendrán futuro en la compañía. Por eso, contar con un plan de desarrollo profesional para las personas trabajadoras tiene un gran impacto en la productividad y en la consecución de los objetivos empresariales.
Conviene tener presente que los trabajadores son el activo más importante de cualquier entidad y que su desarrollo profesional resulta fundamental para los valores y objetivos de la empresa. Por eso, saber incentivar el desarrollo profesional de los empleados conlleva importantes beneficios para la compañía.
Qué es el desarrollo profesional
El desarrollo laboral o profesional hace referencia al proceso de crecimiento, satisfacción y superación en torno a la vida profesional de un trabajador, que alcanza objetivos y metas individuales, y mejora y enriquece sus aptitudes, habilidades y experiencias. Tener la posibilidad de crecer y mejorar día a día o ver que con el paso del tiempo se pueden asumir nuevos retos tiene un impacto directo en la motivación de los empleados.
Desde el punto de vista de la organización esto es todavía más relevante. Nunca debemos perder de vista que, independientemente del grado de digitalización o tecnificación de una empresa, las personas ocupan un rol central en el correcto desempeño y consecución de los objetivos empresariales. Así, el desarrollo profesional permite, entre otras cosas, reducir la rotación de personal y garantizar que la cultura empresarial y sus objetivos van en línea con los de las personas que componen la organización.
En definitiva, gracias al desarrollo profesional, el trabajador evoluciona como profesional, pero también como persona. Se incrementa, por lo tanto, el grado de satisfacción de las personas en todos los sentidos. El desarrollo laboral y el desarrollo personal están, pues, íntimamente relacionados.
Cómo podemos crear un plan de crecimiento y desarrollo profesional
Es imprescindible que las empresas pongan en valor a sus trabajadores como los activos más valiosos de su organización y creen e implementen un plan de crecimiento profesional adecuado.
Las estrategias para desarrollar profesionalmente a las personas trabajadoras son múltiples. Por todos es conocida la capacidad -y necesidad- de la formación continua y su papel central en el desarrollo personal y profesional. De ello hemos hablado mucho en nuestro blog. Existen otras estrategias, muy conocidas, como las políticas de retribución flexible, el modelo híbrido de trabajo, etc; que ayudan a mejorar el bienestar de los empleados.
El salto cualitativo en el plan de crecimiento viene de la mano de la conjugación perfecta entre todos estos elementos. Por supuesto, hagamos lo que hagamos, nunca se debe perder el foco en la sostenibilidad de la organización en su conjunto. De nada sirve contar con el mejor programa de crecimiento y desarrollo profesional si en un período corto de tiempo se ve interrumpido por no poder dar seguimiento.
Para poder elaborar un plan de crecimiento y desarrollo profesional personalizado podemos partir de las siguientes fases o etapas:
Evaluación del empleado
Durante esta etapa, se deberá analizar a la persona trabajadora, identificando sus intereses, habilidades, valores y aptitudes. Además, es importante saber cuáles son sus expectativas profesionales y qué proyección esperan dentro de la empresa.
Para hacernos una idea más global del conjunto de empleados, la evaluación se puede llevar a cabo a través de encuestas de clima laboral.
Evaluación del departamento
Es importante que la proyección profesional del trabajador esté alineada con las necesidades y objetivos empresariales, sobre todo con las del departamento en que el empleado desempeñará su trabajo. Para ello, dentro del plan de desarrollo profesional se han de contemplar los objetivos comerciales, los objetivos del departamento, los objetivos del equipo y los objetivos individuales.
Detección de las oportunidades de crecimiento
El plan de crecimiento profesional deberá ser integral y estar orientado a conseguir un rendimiento mayor de los trabajadores. De este modo, se deberá alcanzar un equilibrio, de forma que tanto la empresa como los empleados obtengan beneficios.
Por un lado, la empresa conseguirá mejores resultados y los trabajadores conseguirán mejorar su vida personal y familiar a través de la profesional. Para ello, es una buena idea llevar a cabo seminarios, cursos y conferencias que fomenten la cohesión de los equipos y su capacitación, y una adecuada interacción entre los responsables y la plantilla.
Evaluación del progreso
Es importante evaluar periódicamente el plan de desarrollo profesional, de forma que se compruebe que este se adapte lo mejor posible a las metas empresariales y de los trabajadores.
El desarrollo profesional de los trabajadores es un proceso fundamental que ayudará a retener el talento y que redundará positivamente en la consecución de los objetivos empresariales.
Sin embargo, todavía queda mucho camino por hacer en este sentido, aunque las organizaciones son cada vez más conscientes de la importancia de contar con personal motivado y comprometido. Lo mejor en estos casos es contar con el asesoramiento de profesionales expertos en recursos humanos. Desde AdelantTa hemos ayudado a nuestros clientes a construir planes de desarrollo profesional personalizados y adecuados a la realidad de la empresa.